A
diez días del tornado que azotó a nuestra ciudad, amplios sectores de la
población continúan sin servicio eléctrico.
La incapacidad e ineficiencia de la
empresa EDENOR, como encargada del suministro y mantenimiento del tendido
eléctrico en Ituzaingó, ha quedado expuesta, a más de una semana del trágico
suceso climático por el que atravesó nuestra ciudad.
Como resultado de aquella política
neoliberal de los ’90, cuando los servicios públicos pasaron a ser gestionados
con una lógica de empresa privada que prioriza el obtener mayores ganancias a
la calidad del servicio prestado, amplios sectores de la población
ituzainguense continúan hoy sin servicio eléctrico (que en nuestra ciudad se
traduce –además- en la falta de agua) a merced de la inoperancia de una empresa
que ha dejado claro no estar a la altura de las circunstancias.
Así, aún hoy, barrios enteros se
encuentran sin luz, con vecinos y vecinas que, al caer la noche, se ven
obligados a transitar por verdaderas bocas de lobos, con todo lo que ello
implica: la posibilidad de sufrir un accidente y calles inseguras.
EDENOR ha dejado a la comunidad de
Ituzaingó librada a su suerte, demostrando que los subsidios millonarios que
recibió por parte del Estado Nacional sólo sirvieron para engrosar sus
ganancias y que no tiene ninguna intención de mejorar la gestión ni de realizar
las inversiones que esta ciudad necesita.
La INTERVENCIÓN de la Empresa y
la posterior QUITA DE LA CONCESION, para que sea el Estado Nacional el
reaseguro de un servicio eléctrico eficaz, a tono con las políticas que se
pusieron en marcha en el 2003, debería materializarse en forma inmediata.
Cjal.
Sebastián Sanguinetti
Cjal.
Emilio de la Cueva Gutiérrez
Cjal.
Raúl Zabala